Este espectáculo ayuda a rescatar a una generación de músicos perdida y que, por su prematura muerte, no tuvieron la posibilidad de desarrollar su carrera. Si un solo espectador o espectadora se siente atraído por un mejor conocimiento de Viktor Ullmann u otros músicos de su generación perdida ya habrá valido la pena. Por la memoria, por nuestra memoria, por la de todos. Para la gente joven y para los adultos, para los que conocen la historia de la barbarie del holocausto y para los que no la conocen o no la recuerdan... Y sobre todo por la música y la poética en la que se entrelazan las emociones que queremos contar y sentir. No es una obra trágica o triste aunque la historia vital de Ullmann nos llegue hacer pensar esto. Su música es vital, reflexiva, empática y nos llega con facilidad
El aclamado pianista Pablo Amorós con una importante carrera internacional, propone una seria de conciertos con una línea temática que hacen las delicias de todos los públicos.